La semana pasada dimos por finalizado el taller de los lunes.
Esta temporada del taller, de la mano de Rosa como voluntaria, se han realizado trabajos manuales y decorativos para dar una segunda vida a cajas sin uso. Con esta técnica podemos reutilizar materiales y organizar mejor los espacios.
Con este tipo de talleres, fomentamos el voluntariado y la participación de las personas con discapacidad de nuestra entidad, además de contribuir en el reciclaje y la agenda 2030.
Esperemos que tras el verano se puedan reanudar estas actividades y encuentros que motivan, a su vez, la creación de espacios seguros para las personas con discapacidad y sus familias.